Rindo homenaje a este geoquímico estadounidense que tanto hizo por la humanidad. Nació en 1922 y murió en 1995. ¿Por qué no es tan conocido como otros científicos, después del legado que nos dejó?
A Patterson le debemos que en 1953 nos diera a conocer la edad de la Tierra, empleando un método lógico y válido como es el de datar un meteorito, roca que, “vagando” por el espacio, tuvo que formarse a la par que nuestro planeta (como después se comprobó con las “rocas génesis” traídas desde la Luna). Gracias a él, hoy sabemos que la Tierra tiene 4.550 millones de años (con un margen de error de 70 millones de años)

Clair Cameron Patterson
Aunque con ese logro es para que Clair Cameron Patterson fuera venerado por la comunidad científica, no fue eso lo que convierte a este activista científico en un referente para las generaciones posteriores. Su mayor logro es el empeño que puso en su trabajo para eliminar el plomo del aire como contaminante. En 1970, por sus esfuerzos, las autoridades norteamericanas iniciaron un proyecto denominado “ley de aire limpio” para intentar eliminar el plomo de los carburantes, pero las grandes multinacionales boicotearon tanto esa iniciativa como al propio Patterson, al que casi condenan al ostracismo.
Pero en 1978 volvió a formar parte del órgano directivo encargado de esa iniciativa, tal como leemos en Wikipedia: “En 1978 fue nombrado a un panel de NRC donde redactó un informe de 78 páginas en el que indicaba que la aplicación del control y de las medidas contra la contaminación por plomo y otros contaminantes debía comenzar inmediatamente, incluyendo a la gasolina, los envases de alimentos, pinturas, esmaltes y sistemas de distribución de agua. Treinta años más tarde la mayoría son aceptadas en muchas partes del mundo.”

El obispo James Ussher calculó por la Biblia que la Tierra se creó a las 8 de la tarde del 22 de octubre del año 4004 a.C.
A su muerte, Patterson había conseguido que el nivel de plomo en sangre de los norteamericanos descendiera en un 80%. Falleció el 5 de diciembre de 1995, sin haber recibido el premio Nobel, y escribieron mal el nombre en su lápida (Claire y no Clair, por lo que puede suponerse que se trata de una mujer). Al menos, el asteroide 2511 fue nombrado Patterson en su honor.
El post sobre cómo se llegó a calcular la Edad de la Tierra, pasando por encima del Obispo James Ussher y hasta por encima del mismísimo Lord Kelvin hay que leerlo AQUÍ. Y si Patterson viviera nos recordaría esto: El plomo, veneno silencioso de millones de niños.