Hugo C, con su post titulado <El animal filosófico y el “optimum”>, me recordó estos fragmentos de un sacerdote católico, que lo fue durante 30 años, y ahora es feliz o, al menos, más feliz de lo que fue en toda su vida anterior: Salvador Freixedo (*), Cristianismo, un mito más, Editorial Posada, México, 1987, p. 289 y ss. Comprueben.
<< ¡Qué funesto ha resultado a lo largo de los siglos el lema de los doctrinarios de todas las religiones!: «¡Cree! ¡No pienses!». A base de no pensar, hemos llegado a creer monstruosidades. Y lo malo es que muchos hombres y mujeres, a fuerza de no pensar, las siguen creyendo y se las siguen queriendo imponer a sus hijos.
¿Cómo es posible que yo haya estado tantos años comulgando con ruedas de molino?
Otra de las causas que contribuyó a ello, fue lo que yo llamo «el miedo sacro». La Iglesia y sus doctrinarios, con el inconsciente deseo de manipular y subyugar las conciencias, nos han llenado el alma de miedos. Y el miedo, no sólo no nos deja pensar, sino que nos impide rebelarnos cuando, por una razón u otra, descubrimos el error de nuestras creencias. El «más allá» del cristianismo —y los protestantes en esto son aún peor que los católicos— es aterrador. El infierno cristiano, que es sólo fruto de mentes enfermizas, pende como una espada amenazadora encima de nuestras cabezas y nos impide tomar decisiones trascendentales.
Si el miedo, según algunos, es lo que llevó al hombre a la religión, el miedo es lo que le impide zafarse de las garras de la religión. Creemos por miedo, y no dejamos de creer también por miedo. El miedo instintivo es una defensa natural en el niño, que lo libra de muchos peligros. Pero el miedo instintivo en un adulto es una vergüenza. Es una señal de que no ha evolucionado.
Mi rebelión contra muchas de las creencias del cristianismo no fue repentina. Sucedió en mí lentamente […] A mí no me dieron visiones totales de la historia de la Iglesia, sino que únicamente me presentaban, ya prejuiciados, los aspectos positivos de ella; y cuando necesariamente aparecía alguno negativo, ya venía con la solución y la explicación aparejada. Es cierto que cuando estudié la dogmática cristiana, debí haber tenido un espíritu más crítico y haber descubierto mucho antes toda la vaciedad de tantas doctrinas sin sentido. Pero, como ya he dicho, mi sentimiento estaba endrogado: era mi Iglesia y era la religión de mis padres; yo no tenía derecho a cuestionarla y por eso ni se me ocurría hacerlo. Mi mente la aplicaba, no a analizar el alimento que le daban a mi espíritu, sino a prepararme para transmitirlo yo a otros de la mejor manera posible. Por eso estuve tanto tiempo comulgando con ruedas de molino.
[…] Sin tener visiones —Dios me libre de ellas—, ni oír voces, ni sentir ninguna iluminación interna, mi mente comenzó a ver claro, hasta que lo vi todo con una claridad meridiana. La falsedad de las religiones paganas me ayudó a ver claramente la falsedad de la mía. Lo absurdo de sus creencias se identificó con la absurdez de las mías. Y por otro lado, los valores profundos e innegables que también encierra el cristianismo, me ayudaron a comprender todo lo que hay de santo y de respetable en las creencias paganas de otros pueblos.
[…] Gozar no es pecado, contrariamente a la subconsciente filosofía trágica de la vida que el cristianismo nos ha infiltrado. Gozar de la vida es una obligación que todo ser racional tiene, o de lo contrario, no tendría razón de ser toda la cantidad de cosas bellas que en ella podemos encontrar. Que sufran los fanáticos masoquistas que se empeñan en seguir credos absurdos dictados por algún visionario demente o manipulado por sabe Dios quién. Digamos que no, a todos los mitos religiosos, por muy arropados de divinidad que se nos presenten. Digamos que no, específicamente, al mito cristiano que tanto daño nos ha hecho y que tanto nos ha impedido progresar. Abramos nuestra mente al Universo, al bien, a la justicia, al amor y a la belleza. Ésta tiene que ser en el futuro la única religión de los seres humanos realmente racionales >>.
Relacionados: El nombre de Dios, Misterios de la Biblia (I), Misterios de la Biblia (III), Misterios de la religión, La vía hacia el ateísmo y La religión es un timo.
(*) Salvador Freixedo nació en Galicia en 1923. Reside en América desde 1947. Perteneció por 30 años a la Orden de los Jesuitas. Fue ordenado sacerdote en 1953 en Santander.
Estudió: Humanidades en Salamanca. Filosofía en la Universidad de Comillas (Santander). Teología en Alma College (San Francisco, California). Ascética en Mont Laurier (Quebec, Canadá). Psicología en Ia Universidad de los Angeles (California), y Fordham University (Nueva York).
Leyendo lo de arriba, me estoy acordando de uno de esos pastores de la radio -Juan Cano, en Dynamis- y su definición del temor de Dios como «respetarle», entre otras gemas del estilo aparte de ser como tantos otros un ignorante incluso en ciencia básica.
Un ser cómo el del AT, con las manos tan manchadas de sangre -y no, ni los canaanitas ni los amalekitas eran «demonios» como tampoco lo son otros dioses distintos al suyo o desde luego Buda, Confucio, o Zoroastro van a doblar su rodilla ante Jesús y confesarle cómo su señor-, desde luego no merece ningún respeto, cómo tampoco los que nos intentan meter en la cabeza pese a lo que dice «el libro» que es todo amor, hasta que por darle la espalda te manda al Infierno.
NOTA DE SIESP:
Como en los barrios más beatos de las ciudades estamos en el mes de mayo, es decir el mes de Maria, pues siempre hay algunos meapilas que sacan un trozo de yeso en procesión cantándole a su Virgen, esa que tuvo siete hijos.
Después de presumir del amor de Dios se van a votar a Vox porque no soportan a los inmigrantes. Los muy idiotas desconocen que su Señor Jesucristo era negro. 😉
QUE ESTOY HACIENDO AQUI?
NOTA DE SIESP:
El imbécil, sin duda.
Excelente post, no aparecieron los comentaristas habituales así los trolls no se llevaron su paliza intelectual.
NOTA DEL BLOGMASTER:
Este post es muy antiguo, por eso los comentaristas actuales no lo han tocado. Pero más antigua es la biblia y sigue produciendo discapacitados intelectuales 😛 😛
Saluts.
Indudablemente tenemos metido hasta la médula la idea religiosa. El propio blogmaster utiliza la frase «sabe dios quien». Me pregunto a cual dios se refiere? Creo que si existe la convicción racional de que no puede existir ningún dios, no necesitamos de ninguna muletilla como la de «sabe dios quien». Comprendo que debe ser difícil romper con años de adoctrinamiento. Por ello estoy en contra de todo tradicionalismo, la tradición solo nos ata al pasado y a ideas irracionales. En fin el artículo es super interesante y es un granito de arena más para quien se atreva a utilizar su cerebro y desafiar las tradiciones, no importa que sean de los padres o de toda la humanidad.
NOTA DEL BLOGMASTER:
Te aseguro que mis palabras están medidas con un nonius. Estoy de acuerdo en todo, pero debo aclararte que no entendiste la ironía.
Gracias por comentar. Saludos.
claramente el miedo te hace huir!
y claramente uno le tiene miedo alo desconocido.
si no conoces adios es por que le temes.
si lo conoces…claramente entonces dejas de temerle, tedas cuentas de todo lo que es capaz el hombre de decir.
fijate en algo, la iglesia esta constituida por hombres, hombres, solo hombres incapaces de amar, incapaces de entregar, hombres que se dajan convencer por teorias, y doctrinas. hombres que confian en lo que lo convence. por lo tanto estamos libres de creer o no. por que si una ves creiste en dios obligado y sin decir nada. tubiste la libertad de salirte de la iglesia, sin que ningun cristiano salga detraz tuyo, persiguiendote. nadie. ni dios.
aun asi dios sabe que lo necesitas.
aun asi dios, te deja libre, haz lo que quieras.
por que dios te ama tanto que te deja hacer y deshacer.
para cuando termines vuelvas a el.
y como te ama tanto, no pondra peros, no pondra por que.
saludos.
NOTA DEL BLOGMASTER:
Lo único que me da verdadero miedo es pensar que todos los libros sagrados del mundo fueron escritos por gente tan culta como tú.
Saludos.
Que bueno esta este blog, concuerdo con todo lo que dicen, por fin encuentro gente que piensa igual que yo, aqui en mi país, la mayoria son fanáticos de la religión y si no piensas igual dicen que sos ateo o raro..
SALUDOS
NOTA DEL BLOGMASTER:
No pasa nada, siempre es mejor ser ateo o raro antes que tonto. Gracias por escribir. Vuelve pronto. 🙂
Saludos.
Aunque he respondido abajo en general, quiero hacerlo con detalle detrás de cada disparate del Bloger o quien sea que escribe sin sentido mentiras y tonterías por un tubo, y lo señalaré con la letra R/.
Temor de Dios
14 Abril, 2009 de CSPR
Hugo C, con su post titulado , me recordó estos fragmentos de un sacerdote católico, que lo fue durante 30 años, y ahora es feliz o, al menos, más feliz de lo que fue en toda su vida anterior: Salvador Freixedo (*), Cristianismo, un mito más, Editorial Posada, México, 1987, p. 289 y ss. Comprueben.
<>.
R/———dices : que sufran los fanáticos……pues bien que sufran.
Los que se empeñan en seguir credos absurdos……………si te refieres al Credo católico…… por muy arropados en divinidad………dictados por no se que demente…….
¿Acaso tu estás cuerdo, eres el único cuerdo porque desprecias a Cristo?
Nuestro Credo es Cristo, El Nuestra Buena Nueva, Nuestra Bienaventuranza, Él nuestra Bendición……..En estas últimas palabras es dónde mas te cubres con el manto de la “ignorancia”, no comprendes nada.
Todo ser racional, por serle tiene derecho a gozar, racionalmente, de todo. Su luz es la razón, así como la el animal es el instinto. Gocemos, pues, racionalmente, según la naturaleza humana dotada de “razón”, iluminada por la fe que dignifica al hombre, cuya luz esplendente es Cristo Jesús: ¡Eh aquí al hombre!
¿En cuanto al credo que tu promulgas, que razón me das para que creamos en ti?
¡Porque te habrás dado cuenta de que tu, no se con que autoridad, estás, fanáticamente, promulgando un credo! O nos haces tontos o te lo haces tu.
Y dices: especialmente el mito cristiano….. otra afirmación gratuita, muy razonada, muy científica….como todas las tuyas. Dime: con que autoridad.
Resulta que nuestro “mito”, es una REALIDAD HISTORICA QUE SE LLAMA JESUCRISTO. Y QUE VIVE Y ESTA RESUCITADO, como lo afirman los que vivieron con él y COMIERON CON ÉL DESPUÉS DE SU RESURRECCIÓN. Y se apareció a Pedro, y a Juan, y a mas de 500 discípulos a la vez……….y por último se me apareció a mi (dice S. Pablo)…Todos ellos ¿mentirosos? Negocio? Ya veo que tú das mas pruebas de tu credo.
Léete los Hechos de los apóstoles. Es un libro escrito por una persona como tu. Sólo constata hechos y palabras. Pero tiene la fuerza del RESUCITADO. LA FE que realiza la Verdad por las obras del Amor a Dios y al hermano.
En fín, con Dios se vive mejor que contigo.
Relacionados: El nombre de Dios, Misterios de la Biblia (I), Misterios de la Biblia (III), Misterios de la religión, La vía hacia el ateísmo y La religión es un timo.
(*) Salvador Freixedo nació en Galicia en 1923. Reside en América desde 1947. Perteneció por 30 años a la Orden de los Jesuitas. Fue ordenado sacerdote en 1953 en Santander.
Estudió: Humanidades en Salamanca. Filosofía en la Universidad de Comillas (Santander). Teología en Alma College (San Francisco, California). Ascética en Mont Laurier (Quebec, Canadá). Psicología en Ia Universidad de los Angeles (California), y Fordham University (Nueva York).
————–Tanto para nada?
NOTA DEL BLOGMASTER:
Al final, sobre los estudios, dices «¿tanto para nada?.
¿Y tú? ¿sabes lo que es un libro?
«Si ese Dios es mi padre, a mí que me borre de la lista de sus hijos«. Le había perdido la pista a este hombre desde el día -hace mucho, mucho tiempo- que le escuché esas palabras (textuales) en la radio. Pensé -incluso- que habría muerto, porque aseguró que llevaba «sesenta años» (textual) en los jesuitas.
Una sorpresa -y un placer- rehallarlo por aquí con tu concurso.
Un saludo.
NOTA DEL BLOGMASTER:
Gracias, Una mirada. Freixedo es un gran tipo. Vio la luz, aunque tarde, y dicidió contar su experiencia a la humanidad. Hoy todavía es, después de 30 años de sacerdocio, un gran combatiente por la libertad y por la eliminación de la jerarquía católica. Yo lo conocí también en radio, cuando seguía estos temas con «pazguatismo», escuchándolo en la primera etapa de «
CerebroEspacio en Blanco» en Rne.Puestos a verle algún inconveniente a Freixedo diré que, en mi opinión, saltó de la sartén al cazo. Y es que abandonó el catolicismo y no se resistió a quedarse ahí. También es de los defensores de la existencia de seres extraterrestres. Pero con eso no causa el daño que realizan los RatzingerZ y Cía. Jejejeje. Gracias por pasarte de nuevo por aquí.
Un abrazo.
Muy buena entrada, a mi me ocurrió como al humorista que ha enlazado Hugo en «Los monos también curan» alguna vez… o quizá fue Bill Maher en «Religulous», no me acuerdo…
«fui creyente… hasta que alcancé la edad de razonar»
🙂
Respecto al origen de la religión, también creo que un fuerte componente es el miedo, uno de los más básicos además.
Un saludo!
NOTA DEL BLOGMASTER:
Cierto, Tay. El miedo aplaca a los débiles y se les maneja mejor. No hay nada como infundir miede al pueblo para erigirse en «salvador»… ¿y quién nos salva de los salvadores?
Si tú infundes confianza y conocimiento en la gente, llegarán a valerse por sí mismos. Si infundes miedo, lo haces para aprovecharte de ellos. Ha sido así siempre, y la religión lo sabe.
Esa frase yo la lei en un libro de Pepe Rodríguez. Era así: «Yo era creyente hasta que tuve uso de razón» 🙂 🙂
Otro saludo.
Y, según Eduard Punset: «la felicidad es la ausencia de miedo», lo cual suscribo. De lo cual podría deducirse alguna cosilla, por una simple regla de tres. Aunque no voy a decirla, porque me da miedo y quiero ser feliz, je, je 😉
Estoy totalmente de acuerdo con lo que dice esta entrada, ya que, de hecho, es el mismo proceso que sufrí yo en propias carnes, para pasar de ser un niño supercreyente a un adulto totalmente ateo (bueno, ya de adolescente realmente no creía, pero creo recordar que fué algo progresivo y de pura lógica, tras superar mis miedos al castigo divino, claro).
Realmente la mayoría de la gente sólo queremos ser felices, por eso, siguiendo la fórmula de la felicidad de Punset, tendemos a evitar los miedos, para lo que hay dos opciones: 1ª- No pensar (u opción creyente) y 2ª- Aceptar la realidad tal como es aunque no nos guste y debamos replantearnos todo lo aprendido, incluso nuestra propia existencia (u opción atea, a la cual me suscribo).
Y, me planto, por ahora.
Un saludo (o dos).
NOTA DEL BLOGMASTER:
Con comentarios como los vuestros se enriquecen las entradas, jeje. Muy pocos en España pueden presumir de haber sido educados en el librepensamiento. La inmensísima mayoría fuimos católicos, aunque nacimos ateos. Conforme vamos adquiriendo conocimientos volvemos a nuestros orígenes. Nos enseñan a tener miedo y, cuando lo perdemos, vemos la realidad tal como es, tal como la define Punset, tal como la defines tú.
Y me planto también 🙂 🙂
Un abrazo.
Para mí está claro que el miedo(hasta se dice vivir en el temor de Dios) es el origen de la religión. En la tribu más primitiva el mago actúa sobre los componentes por que supuestamente sana y vence a la muerte(o al menos eso hace creer) y mas adelante el miedo a la muerte ha permitido a las fundaciones religiosas adquirir riquezas y posesiones a base de salvar el alma del creyente… El hombre se vende por el temor a la enfermedad y a la muerte o al ser superior que regula esto… Y así se crearon las indulgencias cuya función es perdonar el daño moral a cambio de dineros…o posesiones o lo que sea. El miedo estoy de acuerdo en que es el componente básico de las religiones. Y también, la comodidad: es más sencillo instalarse en una creencia o cuerpo de ideas que se adapte a tus intereses y hala, ya tengo colegas que me defienden o que están en la misma línea. El dudar de las cosas, el no tener postulados fijos, el no tener asideros, vivir en un mundo de dialéctica y de contraposición de ideas produce en algunas mentes… inseguridad, es decir, miedo. Bueno, es mi pensamiento.Salu2.
NOTA DEL BLOGMASTER:
Claro que es tu pensamiento, Marcelino. Y muy acertado como siempre, jejeje. Los curas, los chamanes, los ayatolás, los brujos, etc, juegan con dos barajas: te libran de la muerte gracias a ellos, pero como saben que todos morimos, te garantizan que el el «más allá» vas a disfrutar de todo lo que aquí les has regalado a ellos. ¿Y quién regresa con la hoja de reclamanciones? Esa es la clave: la ignorancia.
Y ya conoces el lema de mi blog: «contra la estupidez, los propios dioses luchan en vano» 🙂
Un abrazo.
Me ha gustado mucho esta entrada. Es de las mejores bofetadas antifanáticas que me han dado nunca jaja; con cariño y sutileza, como se han de dar.
«Gozar de la vida es una obligación que todo ser racional tiene […]. Que sufran los fanáticos masoquistas que se empeñan en seguir credos absurdos dictados por algún visionario demente o manipulado por sabe Dios quién.»
Así sea, Siesp 😛
En el caso que nos ocupa, ese visionario «demente» podríamos llamarlo Nietzsche, por ejemplo.
Déjame rescatar un fragmento de la wiki que me parece muy revelador y que me puedo aplicar a mí mismo:
«También Erich Fromm […] estudió el fanatismo e intentó explicarlo aunando psicología y sociología. Su enfoque se resume en el conocido título de su libro «El miedo a la libertad», según el cual, todo fanatismo es un intento regresivo de escapar del surgimiento del individuo y la libertad, debido al miedo que ello causa. El miedo se da ante la angustiosa sensación de separación y aislamiento (soledad) al crecer, que no se resuelve de una manera sana estableciendo vínculos afectivos horizontales con los demás. Se trata, en suma, de la incapacidad de amar.»
http://es.wikipedia.org/wiki/Fanatismo#Naturaleza_psicol.C3.B3gica_del_fanatismo
Gracias por el enlace, pero sobretodo por la lección. Ayer cuando me fui a la cama ya le venía dando vueltas a esto mismo. Me ha venido de perlas jaja.
Un abrazo.
NOTA DEL BLOGMASTER:
Los piropos son mutuos 😉
Probablemente, la clave de todo sea el «Miedo». Muchas veces vislumbramos la solución a un problema y nos da miedo la misma. ¿Por qué? Pues porque desconocemos cómo podremos desenvolvernos en la nueva situación, conociemdo ya cómo nos manejamos en ésta.
Me ha gustado lo que has dicho sobre el crecimiento en vertical y el desarrollo de los lazos afectivos en horizontal como base a la definición «el miedo es la incapacidad de amar».
Desde que me desprendí de todos los dioses, parece que, hasta las cosas más banales, me salen bien. Respiro mejor. Es como si hubiera dejado atrás un yugo que no me permitía disfrutar de la Vida. Y estudiar religiones sin estar implicado en ninguna de ellas es, ahora, interesante.
Otro abrazo para ti.
PD.- No era ninguna bofetada 🙂 🙂 Al contrario. Me has inspirado este post y eso es siempre de agradecer. Y ya sabes que a mi, «Niche», me encanta un montón por sus razonamientos y algo menos por su filosofía.