Carlos Javier Álvarez, doctor en Psicología por la Universidad de La Laguna (Tenerife – España), concluye su libro “La parapsicología ¡vaya timo!” de esta manera:
1.- No existe ni un solo dato científico ni una sola prueba que apoyen la existencia de poderes mentales de tipo paranormal o parapsicológico. Teniendo en cuenta la cantidad de personas que dicen poseerlos, es increíble que, tras tantos años de investigación científica en parapsicología, no tengamos ni un solo resultado coherente, fiable, constante y repetible, como exige la ciencia. (Añadido de este webmaster: Los denominados fenómenos parapsicológicos han sido y son investigados por los autodenominados parapsicólogos y por los científicos. Nunca un científico obtuvo ninguno de los resultados que esos parapsicólogos dicen conseguir. ¿Es que no les parece ya suficientemente evidente quiénes son los que anteponen sus deseos a la realidad?)
Carlos J. Álvarez
2.- Todos hemos vivido experiencias extrañas, anómalas, a las que tendemos a dar una explicación de tipo paranormal. Pero el hecho de que no dispongamos siempre de una explicación racional no implica que deban tener un origen paranormal. Estas experiencias de la parapsicología cotidiana son interesantes no por lo que tienen de raro o sobrenatural sino por lo que nos enseñan sobre el funcionamiento de nuestro cerebro.
3.- Las ciencias de la mente, la conducta y el cerebro ofrecen explicaciones fascinantes a muchos de los supuestos poderes mentales de tipo paranormal. En especial, nos muestran a un ser humano real, y a la vez extraordinario, que puede colmar nuestros deseos de conocimiento y nuestras ansias de maravillas.
En relación con este último punto, me gustaría terminar el librito con una sugerencia que, por supuesto, eres libre de aceptar. Aprendamos a convivir con nosotros mismos, a aceptarnos tal como somos en realidad. Y sobre todo, aprendamos a sorprendernos y maravillarnos de nuestra especie, de cómo la evolución ha logrado producir un cerebro como el nuestro gracias a millones de pequeños cambios y casualidades. Las pequeñas cosas que hacemos a diario –pensar, memorizar, hablar, escuchar, etc.- no tienen nada de mágicas y te aseguro que son tremendamente fascinantes. Todo lo que la ciencia ha descubierto y continúa descubriendo sobre nuestro cerebro puede colmar de sobra nuestro deseo de asombro. Somos una especie extraordinaria e increíble sin necesidad de inventar capacidades estrambóticas, que no tenemos, ni poderes mentales, que no son otra cosa que… un timo.
Más información en estos post: “La parapsicología ¡vaya timo!» y en “El mito del diez por ciento”
Misterios al descubierto 